En la Jornada Mundial de las Misiones

Arzobispo Abdel Sater:
«El objetivo principal de un misionero cristiano es presentar a todos el amor de Dios por ellos»

El texto original fue publicado en MECC el 25 de octubre de 2021. Traducción y publicación por Maronitas.org en colaboración con The Middle East Council of Churches.

Disponible también en árabe y en inglés.

En el Domingo Mundial de las Misiones, el Arzobispo Maronita de Beirut, S.E.R. Mons. Boulos Abdel Sater convocó una misa el domingo 24 de octubre de 2021 en la catedral maronita de San Jorge en Beirut. Funcionarios de diferentes sectores profesionales participaron en llevar el mensaje al mundo, especialmente periodistas, profesionales de los medios de comunicación, jueces, abogados, médicos e ingenieros. El Departamento de Comunicación y Relaciones Públicas del Consejo de Iglesias del Oriente Medio participó en la misa junto con la directora del departamento, la Sra. Huguette Salameh.

El padre Jad Chlouk y el padre Emile Dagher concelebraron con el arzobispo Abdel Sater en la liturgia. Tras la lectura del Evangelio, Su Excelencia pronunció una homilía en la que destacó los objetivos del misionero cristiano y la importancia de su papel: «En este mundo, lleno de fanatismo religioso, aislamiento e introversión, debemos ser misioneros diferentes, es decir, según el corazón de nuestro Señor, en cualquier lugar en el que vivamos o realicemos un determinado servicio».

Y añadió: «El objetivo principal de un misionero cristiano es presentar a todos el amor de Dios por ellos y recordarles que no están solos en esta vida. Dios está presente en ellos para inspirar actos de amor y palabras buenas y amables».

Abdel Sater continuó: «Se nos envía a decir a todo el mundo, independientemente de su religión, raza o condición social y cultural, que Dios te ama, y nosotros también. Estamos llamados a aceptar a los demás y a escucharlos para oír lo bueno que hay en ellos y hacerles saber lo queridos que son para nuestro corazón y para el corazón de Dios».

Se preguntó: «¿Qué ganan los gobernantes cuando ganan las elecciones con un centenar de votos mientras la mayoría de su gente ha abandonado el país? Si quisieran ser gobernantes misioneros, deberían trabajar con integridad, luchando contra la corrupción, rechazando las tentaciones y mostrando humildad y sencillez lejos de la fuerza y la tiranía, porque tendrán que rendir cuentas ante Dios el día del juicio por cada persona que haya tenido que pasar por la opresión, la injusticia y la muerte, directa o indirectamente, por su culpa».

El arzobispo Boulos Abdel Sater concluyó su homilía con las siguientes palabras: «prometemos al Señor ser sus misioneros mediante el amor, la entrega y la aceptación de los demás, para hablar con ellos y respetar su fe y sus creencias, de modo que todos cooperemos para la salvación de nuestro pueblo, nuestra iglesia y nuestro país».

Cabe destacar que la Iglesia Católica universal en todo el mundo celebra la Jornada Mundial de las Misiones el tercer domingo de octubre. Se reza en favor de los misioneros que son testigos de Jesucristo y trabajan por la justicia, la paz, el respeto y la dignidad de todos. Este año, el mensaje de Su Santidad el Papa Francisco en esta ocasión especial llevó por lema: «No podemos dejar de hablar de lo que hemos visto y oído» (Hch 4, 20).

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